domingo, 31 de enero de 2016

Historia del edificio Kavanagh. A 80 años de su inauguración.

Por Carlos Szwarcer

A comienzos de la década de 1930 Corina Kavanagh era una joven estanciera de origen irlandés, excéntrica e interesada en todo lo que fuera vanguardia, al punto que hacia 1933 tuvo la idea de vender dos de sus estancias para construir un edificio de rentas destinado a vivienda. Hay quienes dicen que la idea fue en realidad de sus abogados, Diego Garret Kavanagh y Pablo Cárdenas. Sin embargo, lo cierto es que Corina vendió sus tierras y compró un terreno sobre la barranca que da a la Plaza San Martín, un triángulo que forman la unión de las calles Florida y San Martín. Este terreno pertenecía a Carlos Alfredo Tornquist, quien alguna vez planificara la extensión del Plaza Hotel a toda la manzana. Sin embargo, finalmente no fue así y Tornquist lo vendió a la señora Kavanagh. La zona donde se levantaría el futuro edificio era una de las más cotizadas de la ciudad e incluso había sido proyectada por la Comisión de Estética Edilicia como la “gran puerta de entrada a la ciudad”, ya que en el bajo se encontraban las Estaciones “Retiro” de los Ferrocarriles Central Argentino, Pacífico y Central Córdoba (hoy Mitre, San Martín y Belgrano).


La intención de Corina Kavanagh era que su edificio le devolviera buena parte del dinero invertido. Su idea era destinar el alquiler de sus departamentos a las jóvenes familias ricas de Buenos Aires, los únicos que habían podido sobrevivir a la crisis económica. Por eso, se preocupó de que tuviera todo lo mejor de la época en cuanto a confort y adelantos. Para el proyecto fue convocado el estudio conformado por el arquitecto uruguayo Gregorio Sánchez (1881-1941), el ingeniero Ernesto Lagos (1890-1977) y Luis María de la Torre (1890-1975).

El 24 de junio de 1933 fue subastada la demolición de las construcciones que existían en el terreno donde se levantaría el futuro edificio y a fines del mes de agosto éste quedó totalmente liberado de escombros. Finalmente, se comenzó con la estructura en enero de 1934, quedando las obras a cargo de la Empresa Constructora Rodolfo Cervini S.A. En un primer momento el Edificio Kavanagh iba a tener una altura similar a la de su vecino Plaza Hotel, pero finalmente, se decidió construir un rascacielos, que fuera el edificio más alto de Buenos Aires. No fue difícil conseguir el permiso de la Municipalidad para aumentar la altura original, ya que el rascacielos remarcaría la idea de “puerta de la ciudad” que se pretendía para su entorno. Como compensación se pidió que se abriera una calle transversal semipública de 10 metros de ancho entre el Plaza Hotel y el futuro edificio. La noticia fue recibida con asombro y júbilo por la opinión pública porteña.

En La Nación del 3 de febrero de 1934 se publicó que “Buenos Aires quiere librarse de la chatura que le oprime y que sus urbanistas y críticos le enrostran con frecuencia y tiende a elevarse por sobre el ordenado amontonamiento.”

Según la leyenda, Corina Kavanagh, enemistada con la Iglesia Católica, decidió construir el rascacielos para taparle la visión de la Iglesia del Santísimo Sacramento (sobre la calle San Martín) a su amiga Mercedes Castellanos de Anchorena, quién donara el dinero para la construcción de la misma y por ese entonces viviera en la mansión que hoy es el Ministerio de Relaciones Exteriores. No obstante, parecería ser que esta historia es solo un mito, ya que hay quienes dicen que Corina nunca estuvo peleada con la Iglesia. Además, Mercedes de Anchorena murió hacia 1920, mucho tiempo antes de la construcción del edificio.

El hormigonado del “Edificio Kavanagh” se terminó el 28 de octubre de 1934. En ese entonces, se convirtió en la estructura de hormigón armado más alta del mundo, superando al Prédio Martinelli de San Pablo. La construcción fue celebrada por todos los porteños, al punto que aprovechando el Congreso Eucarístico que se llevó a cabo en Buenos Aires en octubre de aquel año, fue instalada una cruz gigante sobre la fachada, en la parte más alta del edificio. La obra duró tan solo 20 meses ya que finalizó el 30 de septiembre de 1935, costando un total de $3.617.496. El edificio fue finalmente inaugurado oficialmente el 15 de enero de 1936. Con unos 110 metros de altura hasta la azotea y 120,35 hasta la cima del mástil, se convirtió en el edificio más alto de Argentina y de Latinoamérica. Sus 30 pisos también fueron un récord para la historia de la construcción del país, ya que era la primera vez que un edificio llegaba a esa cantidad de niveles altos. Su altura superó al Palacio Barolo, al Edificio SAFICO e incluso a los 106 metros de las torres de la Basílica de Nuestra Señora de Luján, terminada en 1930.

El Kavanagh debió limitar sus plantas al complejo perímetro triangular del terreno. Fue construido en base a cinco volúmenes yuxtapuestos. Francisco Liernur opina que desde el punto de vista estilístico repite un tratamiento difundido en Estados Unidos e incluso ya practicado por sus autores en el edificio de Córdoba y Libertad, donde se anticipa la escalonada silueta del rascacielos de la Plaza San Martín.  “Se trata de un perfecto híbrido, de una respuesta de compromiso a distintos requerimientos, resuelta con gran inteligencia compositiva. Compromiso entre programa y normas edilicias, entre contexto inmediato y significación urbana, entre enraizamiento y objetualidad, entre tipología moderna y resolución tradicional en planta, entre dinamismo y frontalidad, entre vanguardismo tecnológico y resolución artesanal.”

Los números del Kavanagh fueron sorprendentes para su época. Durante su construcción debieron prepararse 1.500 planos y planillas para una superficie edificada de 25.800 m2.  En las estructuras de hormigón fueron utilizadas 1.600 km. de barras de hierro en tanto que el total de las cañerías de agua, vapor, desagües y conductores eléctricos alcanzó los 90 km. La instalación eléctrica fue equivalente a la que se necesitaría para abastecer a una ciudad de 80.000 habitantes, a la vez que el equipo refrigerante del acondicionador de aire (único en el mundo) podía generar hielo para un conglomerado urbano de 75.000 personas. En las obras llegaron a trabajar 613 obreros diarios... para conducir el total de 23.260 tn. de materiales empleados fue necesario hacer 5.000 viajes de camión.

Al momento de su construcción el Kavanagh fue considerado como el edificio de renta más completo de Sudamérica, además de ser el primero del mundo en tener un equipo de aire acondicionado central.  Como se deseaba contar con los servicios más modernos, todos los departamentos tuvieron cocinas eléctricas... en los “offices” y “halls” de servicio fueron instalados muebles metálicos. Los placards de los dormitorios, a su vez, fueron equipados con estantes de cedro.

El esquema del edificio se compone de sótano, planta baja, 30 pisos con un total de 102 viviendas repartidas en seis alas y un mirador en la terraza, lo que sería el piso 31°. La planta baja fue dedicada a los grandes ambientes de recepción, con entrada cubierta para autos, salas de espera, de informaciones, de teléfonos, toilettes, vestíbulos y galerías. Sobre el frente de la calle Florida se ubicó la entrada principal (N° 1065) así como también varios locales para negocios, en tanto que sobre San Martín fueron instalados pequeños consultorios para profesionales con entradas directas desde la calle. En el hall central se ubicaron los 12 ascensores rápidos... El ingreso fue enmarcado por una puerta giratoria y una escalinata de mármol. Los palieres que se abren hacia las alas del edificio, a su vez, fueron diseñadas con boiserie de roble y sillones de cuero a sus lados. Hay quienes dicen que todo el mobiliario y las obras de arte eran propiedad de Corina Kavanagh.

El piso 31°, tiene una terraza mirador de 80 m2 de superficie con un observatorio astronómico...El piso más lujoso es el 14°, compuesto por un solo departamento que tiene tres terrazas y ocupa casi 700 m2.Por esa vivienda pasaron Maurice Chevalier, Charles Aznavour, Edith Piaf, Sammy Davis Jr. y Camilo Sesto, entre otros. Allí también, en el jardín, solía tomar sol Nélida Lobato. ... Muchos famosos fueron residentes de edificio, y Corina Kavanagh ocupó e sexto piso hasta el día de su muerte, ocurrida en 1984.

En 1948, fue aprobada la Ley N° 13.512 de Propiedad Horizontal. Hasta ese momento los edificios destinados para vivienda no podían ser vendidos por unidades, dado que la legislación existente impedía fraccionar los inmuebles en propiedad horizontal. Esta ley tardó mucho tiempo en ser aprobada en Argentina, sobre todo si comparamos con otros países de Sudamérica, tal el caso de Brasil (1928), Chile (1937) y Uruguay (1946). Una vez aprobada, los edificios en Argentina presentaron sectores de propiedad exclusiva (departamentos) y áreas de propiedad común (accesos, servicios, etc.). Corina Kavanagh perdió gran parte de su fortuna a causa de la Ley de Propiedad Horizontal, ya que debió vender todos sus departamentos. Sólo mantuvo para sí dos del ala C, en el 6° y 7° piso.

Durante los primeros gobiernos de Juan Domingo Perón (1946-1955) el Kavanagh fue atacado por ser considerado como un baluarte de la aristocracia. Hay quienes dicen que Evita quiso comprarlo o en peor situación para los propietarios, expropiarlo, para destinarlo a los trabajadores. Algunos vecinos cuentan que cuando la quema de las iglesias en 1955, hubo algunos fanáticos que quisieron incendiar el edificio, cosa que no llegó a concretarse porque allí vivía el Secretario de Comercio de Perón.

El Edificio Kavanagh completó la tetralogía de los rascacielos modernistas en Buenos Aires, junto con los edificios COMEGA, SAFICO y el Ministerio de Obras Públicas. En la actualidad, es uno de los símbolos más importantes de la ciudad. Además, es un hito en la arquitectura de nuestro país. Los laureles que obtuvo son múltiples: Premio Municipal de Casa Colectiva y Fachada (1936), Mención Honorable del “American Institute of Architects” (1939), Hito de la Ingeniería Civil Internacional (1994) y Patrimonio Mundial de la Arquitectura de la Modernidad en la lista de la UNESCO (1999). En el caso del tercer premio mencionado, cabe destacar que lo otorga la “Asociación de Ingeniería Civil de Estados Unidos” y que solo fue entregado a 17 obras, entre ellas la Torre Eiffel y el Canal de Panamá. Finalmente, no podemos dejar de mencionar que en abril de 1999, la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos lo declaró Monumento Histórico Nacional.

No cabe ninguna duda de que el Kavanagh marcó un punto de inflexión en la historia de los rascacielos de Buenos Aires. Es que por más que ya no sea el más alto, siempre será “el” rascacielos porteño por excelencia. En este sentido, el arquitecto César Pelli, quien llama al Kavanagh “porteño entrañable”, explica que “un rascacielos va más allá [de la altura] y responde también al rol simbólico-espiritual de destacarse sobre el cielo. Reconoce que la gran altura trae aparejada la responsabilidad de darle forma a la silueta de la ciudad. No podemos imaginarnos a París sin la torre Eiffel o a Nueva York sin el Empire State. El edificio Kavanagh es un buen rascacielos. Llega al cielo en varios pasos reverentes y su tope es delicado y reconocible.

A fines de la década del 1930, el Kavanagh comenzaría a dejar de ser el edificio más alto de Latinoamérica, así como también el más alto del mundo construido en hormigón armado. Una vez más sería la ciudad brasileña de San Pablo la que tomaría la posta. Hacia 1939 el BANESPA (Banco del Estado de San Pablo) se encontraba en un momento de expansión y por lo tanto necesitaba construir una sede más grande. Así fue que en ocho años levantó una mole de 35 pisos y 161 metros de altura que superó ampliamente al Kavanagh. El Edificio del BANESPA estaba inspirado en el Empire State Building de Nueva York,

Fuente: "RASCACIELOS PORTEÑOS. 1ra ed. Buenos Aires. Gobierno  de la Ciudad de Buenos Aires, 2005.

© Copyright 2005 by Leonel Contreras

* Aquí presentamosdel libro mencionado- un resumen del Capítulo VII: "EL GIGANTE DE LA BARRANCA. -Historia y leyenda del Edificio Kavanagh-"

jueves, 28 de enero de 2016

Buenos Aires – París – Buenos Aires (Roberto Plate)

Por Carlos Szwarcer

El Museo Nacional de Bellas Artes, entre el 12 de enero y el 27 de marzo, realiza una exposición antológica del artista argentino Roberto Plate, en la que se presenta su obra pictórica, su labor como escenógrafo y se recrean varias de sus instalaciones históricas.

Buenos Aires – París – Buenos Aires se propone como un homenaje a la trayectoria de un artista insoslayable de nuestra historia, ligado a los vaivenes de la vida social y política del país desde los años sesenta.


La exposición permite acceder al original universo poético de Plate y apreciar la compleja articulación de todas sus líneas de trabajo, que van de la pintura a la escenografía, de la performance a la instalación, construyendo un interrogante radical a nuestra época desde diversos registros.

La muestra cuenta con la curaduría de Raúl Santana y el apoyo de la Embajada de Francia en Argentina, y reúne algunas de las obras más importantes del artista en su faceta como pintor y de su incursión en diferentes técnicas y géneros que abarcan el arte conceptual, las instalaciones, el happening y el teatro.

En el núcleo histórico de la exposición se exhiben aquellas obras emblemáticas que Plate realizara en la década del sesenta. Se trata de las instalaciones que imitan la realidad en un intento de que el público no lo advierta, como Los ascensores (1967, Museo de Arte Moderno) y Baños Públicos (1968, Instituto Di Tella), obra que, debido a los grafitis contra la dictadura militar del General Juan Carlos Onganía pintados por el público, provocó la clausura de la muestra constituyendo uno de los hitos y de las mayores censuras en la historia del arte argentino. Este hecho marcó la carrera y la vida de Plate y motivó su partida hacia París, ciudad donde aún reside.

También forma parte de la muestra una de sus obras de mayor impacto visual, la nueva versión de la instalación Reflejos, presentada originalmente en París en la década del noventa.

Asimismo, la exhibición cuenta con un video documental que recopila entrevistas, registros de muestras anteriores, instalaciones, escenografías, trabajo en el taller y cortos que dan cuenta de la gran trayectoria que Roberto Plate ha desarrollado en Europa y Argentina.

“Es un orgullo presentar esta exposición antológica de Roberto Plate en el comienzo de mi gestión como Director del Museo Nacional de Bellas Artes”, sostiene Andrés Duprat. “La muestra se propone como un homenaje a la trayectoria de un artista insoslayable de nuestra historia, que padeció censuras, exilios y exclusiones del sistema de circulación de las artes. Podemos considerar su corpus de obra como un proceso de búsqueda e indagación constante sobre el sentido de un mundo en mutación. El artista le toma el pulso a cada época, la condensa, la conjura, le mira el revés de la trama; irreverente ante la historia, vive intensamente en la más pura contemporaneidad”.

“La obra de Roberto Plate parece responder con sus aristas múltiples, a aquella reflexión aristotélica que dice: toda materia desea ser forma, pero no se puede llegar a la forma sin interpretar el deseo de la materia, que es lo que nuestro artista ha sabido encontrar en cada una de sus más variadas expresiones”, sostiene por su parte Raúl Santana en su texto curatorial.

Roberto Plate nació en 1940 en Buenos Aires. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Múnich a principios de los sesenta y vive en París desde 1970. Sus obras se han exhibido en el Instituto Di Tella, la Fundación Klemm, Fundación Proa, Galería Praxis, Galería Wussmann, Centro Cultural Recoleta, École de Beaux-Arts y Galerie Skyline de París, y sus escenografías fueron puestas en escena de algunos de los teatros líricos más importantes del mundo.

Roberto Plate. Buenos Aires - París - Buenos Aires. Antológica puede visitarse hasta el 27 de marzo, de martes a viernes de 12:30 a 20 hs., y sábados y domingos de 9:30 a 20 hs. Las visitas guiadas a la exposición se realizan a partir del 21 de enero, de jueves a domingos a las 18 hs.

Fuente:
http://www.cultura.gob.ar/agenda/muestra-antologica-de-roberto-plate/

LUGAR: MNBA - Museo Nacional de Bellas Artes.  Av. del Libertador 1473. Recoleta. Ciudad de Buenos Aires. Argentina. Tel: +54 (011) 5288-9945


martes, 26 de enero de 2016

Muestra de tapas de las revistas y sus ilustraciones en la Argentina.

Por Carlos Szwarcer

Muestra de la historia de las tapas de las revistas y sus ilustraciones en la Argentina. Del 23 de enero a fines de marzo en el Edificio de la Munich.

Fecha: 23 01 al 31 03 2016. Lunes/Martes/Miércoles/Jueves/Viernes de 11:00 hs a 18:00hs, excepto feriados. Sábados y Domingos de 10:00 hs a 20:00 hs, excepto feriados
Dirección: Avenida De Los Italianos 851 (Ciudad de Buenos Aires)


La muestra "De tapas" exhibe las ilustraciones originales que desde las portadas de las revistas sedujeron a sucesivas generaciones de lectores, convirtiendo a los quioscos en imprevistas galerías de arte al paso. Así, por una parte despojadas del andamiaje de la producción editorial y de la inmediatez de su función original, estas ilustraciones pueden apreciarse especialmente a través de sus valores plásticos. Hoy se releen como el repertorio documental de una extraordinaria iconografía. El impacto visual y la sugestión de los motivos y resoluciones técnicas, los estilos identitarios contundentes y la gran potencia de sus figuras han surgido desde la práctica editorial periodística de los ilustradores, devenida en solapada academia.

En tanto la ausencia de dibujo, la preponderante fotografía y el predominio del diseño gráfico homogeinizan equilibrando visualmente el cartelismo actual, licuando el impacto, la seducción y la conmoción que durante más de un siglo produjeron las portadas como ventanas de ese hervidero de discursos que es la revista, “De tapas” habilita una revisión histórica de las grandes inflexiones de las máscaras de las publicaciones periódicas y del modo en que asaltaron la calle.

Con más de 100 obras originales exhibidas junto a sus éditos, la muestra"De tapas" comprende trabajos de Hugo Pratt, José Luis Salinas, Alberto y Enrique Breccia, Guillermo Roux, Raúl Fortín, Dante Quinterno, Andrés Cascioli, Oscar Chichoni, Lino Palacio, Carlos Nine, Lucho Olivera y Alfredo De La María, entre otros. La mayor parte de las obras originales nunca habían sido exhibidas, y algunas aún permanecen inéditas, permitiendo reconstruir los pasos en la singular producción del arte.

Curador: José María Gutiérrez.

ENTRADA. General: Jueves a domingos y feriados $10; lunes, martes y miércoles gratis. Menores de 14 años: gratis todos los días. Sábados gratis presentando la tarjeta VOS

Fuente: http://agendacultural.buenosaires.gob.ar

sábado, 23 de enero de 2016

Aníbal Troilo (Pichuco) y Buenos Aires

Por Carlos Szwarcer

Aníbal Troilo, "Pichuco", bandoneonista, director y compositor, uno de los máximos exponentes del Tango, nació en el barrio del Abasto, en la ciudad de Buenos Aires. En un reportaje dijo de su ciudad natal:

"De Buenos Aires tendría que decir muchas cosas... Que es mi vida, que es el tango, que es Gardel, que es la noche... Que es la mujer, el amigo... Tendría que decir muchas cosas y muchas no sabría cómo decirlas... Pero anote esto: agradezco haber nacido en Buenos Aires." (Aníbal Troilo - "Pichuco")
Aníbal Troilo, por Walter Toscano.
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http://www.troilo.com.ar/anecdotas.htm

viernes, 22 de enero de 2016

Plaza Roberto Arlt

Carlos Szwarcer

La plaza Roberto Arlt se encuentra en el cruce de las calles Rivadavia y Esmeralda, en Buenos Aires. Su nombre recuerda al célebre escritor argentino. Fue inaugurada en 1971. Ocupa parte de una manzana en el centro de la ciudad que estaba edificada desde tiempos coloniales. La plaza se abrió con la demolición de la Confitería del Gas (Rivadavia esq. Esmeralda), la antigua Asistencia Pública (Esmeralda 80) y un edificio de departamentos en donde había vivido Lisandro de la Torre (Esmeralda 22).


Una canción del dúo "Vivencia" se refiere a este breve espacio que, sumergido entre las moles de cemento de la urbe, regala un poco de verde para el relax, y bancos y escalones para detenerse en un descanso, la conversación o un almuerzo fugaz. Lugar un tanto escondido pero frecuentado por porteños y turistas que recorren el centro de la ciudad.

Plaza Roberto Arlt
Letra y música: Vivencia

Plaza Roberto Arlt
un domingo en cada lunes
un minuto en muchas horas
y en la vereda de enfrente
la rutina que no duerme
espera, que llegue el viernes

Plaza Roberto Arlt
empleados del lugar
se desarman en tus faldas
buscando un poco de cielo
el dominio sobre el cesped
que juega, que habla
con tus figuras de hierro

Plaza Roberto Arlt
a la gente le regalas
un silencio en el murmullo
frenándole las nostalgias
te conviertes en la almohada
de esa lágrima que pasa
por Esmeralda y Rivadavia

https://www.youtube.com/watch?v=urAAX3R4kJ4

domingo, 17 de enero de 2016

Astor Piazzolla por Pérez Celis (Piazzollanando.1994)

Por Carlos Szwarcer

El artista plástico Pérez Celis (1939- 2008), interesado por el tango argentino, pintó "Piazzollanando"en homenaje al extraordinario músico Astor Piazzolla (1921- 1992).

Pérez Celis- Técnica mixta sobre tela. 192 x 161 cm (1994).
Fuente: http://www.coleccionfortabat.org.ar

miércoles, 13 de enero de 2016

Veredas de Buenos Aires (Julio Cortázar)

Por Carlos Szwarcer

"Veredas de Buenos Aires"
Poema
Letra: Julio Cortázar

De pibes la llamamos vereda
y a ella le gustó que la quisiéramos,
en su lomo sufrido dibujamos tantas rayuelas.
Después, ya más compadres, taconeando,
dimos vuelta manzana con la barra
silbando fuerte para que la rubia del almacén
saliera a la ventana.
A mi me tocó un día irme lejos,
pero no me olvidé de las veredas,
aquí o allá las siento
como la fiel caricia de mi tierra.


Fuente: http://www.todotango.com/

viernes, 8 de enero de 2016

Listado de las sedes comunales de la ciudad de Buenos Aires

Por Carlos Szwarcer

La Ciudad de Buenos Aires se encuentra organizada en 15 Comunas que se rigen bajo la Ley 1.777 sancionada en 2005. Se trata de unidades descentralizadas de gestión política y administrativa que, en algunos casos, abarcan a más de un barrio porteño.
Las 15 comunas incluyen 48 barrios, según el artículo 1° de la Ordenanza N° 26.607/72 y sus modificatorias:
Listado de las sedes comunales

Comuna 1
Retiro – San Nicolás – Puerto Madero – San Telmo – Monserrat – Constitución
Sede Comunal: Uruguay 740
Teléfono: 4370-9700

Comuna 2
Recoleta
Sede Comunal: Uriburu 1022
Teléfonos: 4823-1165 / 72

Comuna 3
Balvanera – San Cristóbal
Sede Comunal: Junín 521
Teléfonos: 4375-0644 / 5

Comuna 4
La Boca - Barracas – Parque Patricios – Nueva Pompeya
Sede Comunal: Av. Del Barco Centenera 2906
Teléfonos: 4918-1815 / 8920
Sede Comunal: Av. Suárez 2032
Teléfonos: 4301-6679 / 6645 / 6536 / 4628 / 3867

Comuna 5
Almagro - Boedo
Dirección: Sarandí 1273
Teléfonos: 4306-0947 / 4305-2878 / 4304-3754

Comuna 6
Caballito
Sede Comunal: Patricias Argentinas 277
Teléfonos: 4958-6504 / 7660 / 7047

Comuna 7
Flores – Parque Chacabuco
Sede Comunal: Av. Rivadavia 7202
Teléfonos: 4637-2355 / 4145 / 6902 / 4613-1530

Comuna 8
Villa Soldati – Villa Riachuelo – Villa Lugano
Sede Comunal: Av. Roca 5252
Teléfonos: 4605-1735 / 2631

Comuna 9
Liniers – Mataderos – Parque Avellaneda
Sede Comunal: Timoteo Gordillo 2212
Teléfonos: 4687-6251 // 4686-2115
Sede Comunal: Av. Directorio 4344
Teléfono: 4671-0804 // 4636-2299 / 2022

Comuna 10
Villa Real – Monte Castro – Versalles – Floresta – Vélez Sarsfield - Villa Luro
Dirección: Bacacay 3968
Teléfonos: 4636-2898 / 2490 / 2398 / 2262 / 1678

Comuna 11
Villa General Mitre – Villa Devoto – Villa Santa Rita – Villa del Parque
Dirección: Av. F. Beiró 4629
Teléfonos: 4501-5583 / 0287 // 4504-5019

Comuna 12
Coghlan – Villa Urquiza – Saavedra – Villa Pueyrredón
Dirección: Miller 2751
Teléfonos: 4522-9947 / 4745

Comuna 13
Núñez – Belgrano - Colegiales
Dirección: Av. Cabildo 3067
Teléfonos: 4702-3748 / 9

Comuna 14
Palermo
Dirección: Av. Cnel. Díaz 2110
Teléfonos: 4827-5957 / 5954 / 7376

Comuna 15
Chacarita – Villa Crespo – La Paternal – Villa Urquiza – Agronomía – Parque Chas
Dirección: Av. Córdoba 5690
Teléfonos: 4771-1960 / 0750 / 2305 / 1306
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