jueves, 6 de octubre de 2016

DÍA DEL CIRCO

Por Carlos Szwarcer

En la Argentina, el 6 de octubre se celebra el Día del Circo en homenaje a Pepe Podestá, que nació ese día de 1858 en Montevideo y que desarrolló aquí una labor pionera, generó las bases del circo criollo e inventó al genial personaje “Pepino el 88″, un payaso que fue modelo del cómico rioplatense. Falleció el 5 de marzo de 1937 en La Plata(Pcia de Buenos Aires)

Pepe Podestá
***
Un recuerdo para otros grandes del género, como Pepe Biondi, José "Pepitito" Marrone, Carlitos Balá, Carlitos Scazziota, Firulete (Gerarado Samaniego), acompañado por Santiaguito, y tantos otros...


***

Algo de historia: "En Buenos Aires el primer teatro estable fue el de La Ranchería, que funcionó en la actual calle Perú entre Moreno y Alsina, desde 1783 hasta su incendio en 1792. Pasaría todavía un largo siglo para que apareciera el teatro gauchesco, con la obra Juan Moreira, sobre textos de Eduardo Gutiérrez, interpretada, como pantomima, por la Cía. Podestá en 1884, en el picadero circense de los hermanos Carlo y el 10 de abril de 1886, en su versión hablada, en Chivilcoy, provincia de Buenos Aires. El teatro nacional daba sus primeros pasos en el Circo Criollo
En tanto el circo, presente desde antaño en el Río de la Plata, había comenzado una lenta renovación hacia mediados del siglo XIX, experimentaría cambios significativos y acordes con los tiempos sociales y culturales que se vivirían. Sus símbolos, en el último cuarto del siglo, fueron tres extraordinarios payasos: el genovés Pablo Raffetto, experto en lucha grecorromana; el inglés Frank Brown, Rey de los Clowns; y José Pepe Podestá, creador del famoso payaso Pepino el 88, el más prestigioso de un clan familiar. 
Los empresarios circenses como Raffetto, los Podestá o los hermanos Carlo, alrededor de los años 90, comenzaron a incorporar payadores y obras dramáticas, ofreciendo un espectáculo amplio y variado que iba de la risa al llanto, de la música a la crítica social. Fueron estas notas distintivas las que le dieron al circo, no sólo una misión de diversión o pasatiempo, sino de trascendencia en la formación del acervo nacional, reconociéndosele características de “mediador” entre los diferentes espacios culturales e “integrador social”. 


(Fragmento de "Prehistoria del Teatro Maipo", Carlos Szwarcer  en "Todo es Historia" Nº 436. Noviembre de 2003, Buenos Aires. Argentina).

No hay comentarios:

Publicar un comentario